07/07/2016
Toma de contacto con el nuevo Audi Q2
(de ABC Motor)
La marca de los cuatro aros no deja de sorprender. Ahora, tras los pasos del Q3, el Q5 y el Q7 llega el benjamín de la gama con un aspecto tan poderoso o más que estos y tan buenos argumentos.
Exteriormente, el nuevo Audi Q2 se diferencia bastante de sus hermanos por una nueva parrilla de diseño octogonal más alta y unas buenas entradas de aire que le dan un aire singular y potente. En el lateral, dos elementos llaman la atención: por un lado una cintura muy alta que deja poco espacio al cristal de las ventanas y por otro el que entre la puerta y el maletero se hayan incluido unos “blades” que pueden ir en distinto color al resto del coche. Detrás, tal vez se encuentre la parte más original del coche. La chapa es muy alta y deja poco espacio para el cristal aunque está bien resuelto porque deja una buena visión hacia atrás y le da un aire muy potente.
En cuanto al interior, aunque el Q2 es el pequeño de la gama tanto la primera impresión desde fuera como una vez a los mandos o sentados en la parte de atrás, sorprende porque no es tan pequeño.
Delante es claramente un Audi con un diseño del salpicadero limpio y muy moderno en el que todo resulta fácil de encontrar y qué domina una pantalla de 7 pulgadas de serie. Además y como viene siendo habitual en los últimos Audi opcionalmente se podrá pedir con el magnífico Audi virtual cockpit, el cuadro de información digital que sustituye a los relojes tradicionales y que se puede configurar al gusto de cada uno. También la postura de conducción resulta como en otros Audi, de primera y aunque, como hablábamos antes, aparentemente hay poco cristal y mucha chapa, en cualquiera de las plazas se encuentra uno muy cómodo y nada agobiado. Detrás, como en prácticamente todos los coches, dos adultos y un menor viajarán sin problemas. Además, e incidiendo en cuestiones de espacio el nuevo Q2 llega con un muy buen maletero con 405 litros o 1.050 con los asientos abatidos y opcionalmente se puede abrir o cerrar simplemente pasando el pie bajo el paragolpes. (...)
A los mandos
Hemos podido conducir tanto los dos pequeños gasolina y diésel de 116 caballos como el diésel de 150CV y como viene siendo norma de la casa el funcionamiento de los tres es excelente. Es verdad que todos los coches venían con la caja de cambios S tronic y para ella todo son parabienes. El espacio interior será más que suficiente para muchas familias si saben viajar sin llevarse la casa a cuestas y tanto la manejabilidad como la estabilidad están a prueba de bombas. No pudimos forzar mucho las prestaciones porque en tierras suizas los radares están plantados por doquier pero aun así en zonas de curvas el aplomo del coche era sobresaliente.